El Servicio de Ayuda a Domicilio es una prestación, realizada preferentemente en el domicilio, que proporciona, mediante personal cualificado y supervisado, un conjunto de actuaciones preventivas, formativas, rehabilitadoras y de atención a las personas y unidades de convivencia con dificultades para permanecer o desenvolverse en su medio habitual.

Este servicio está destinado a todas aquellas personas y unidades de convivencia que carezcan o tengan mermada la autonomía, temporal o permanentemente, para mantenerse en su medio habitual de vida y que residan en los municipios que componen la Zona de Trabajo Social Norte y la Zona de Trabajo Social Sur.

El Servicio de Ayuda a Domicilio ofrece dos tipos de actuaciones:

  • De carácter doméstico: actividades y tareas que van dirigidas fundamentalmente al cuidado del domicilio y sus enseres como apoyo a la autonomía personal y de la unidad de convivencia.
  • De carácter personal: actividades y tareas que fundamentalmente recaen sobre las personas usuarias dirigidas a promover y mantener su autonomía personal, a fomentar hábitos adecuados de conducta y a adquirir habilidades básicas, tanto para el desenvolvimiento personal como de la unidad de convivencia, en el domicilio y en su relación con la comunidad.

Con la entrada en vigor de la Ley de Dependencia, el número de personas atendidas en el Servicio de Ayuda a Domicilio ha aumentado considerablemente, teniendo en la actualidad unos 650 usuarios/as y unos 300 trabajadores.